Gracias a L.J Smith por crear a nuestro vampiro más sexy y rebelde...

Capítulo 12: Vinculos


Tenía las mejillas sonrosadas y el cabello rebuelto pero seguía estando encantadora. Apoyó su cabeza en mi hombro y con una mano iba dibujando formas en mi pecho.
-Hacía mucho que no me entregaba a nadie. -comentó sin dejar de acariciarme. Me sentí satisfecho por un lado pero mezquino por otro. Se había entregado a un monstruo.
-Me gusta escuchar eso, pero creo que no soy la persona o cosa adecuada. -no dejé de acariciarle el sedoso cabello.
Alzó la cabeza para mirarme a los ojos.
-¿Por qué dices eso?
-Porqué soy un monstruo. -hice el intento de una sonrisa.
-Nadie es perfecto. -me dió un golpecito en la nariz. Sus palabras me hicieron gracia.
-Tú lo eres.
-Lo siento, no lo soy. Alguien perfecto no se hubiera fijado en un monstruo ¿no?
Comenzamos a reir. Era extraño la sensación de confianza que me transmitía.
-¿Y ahora qué hacemos?-le prengunté con una sonrisa torcida.
-¿Tienes algo mejor que hacer?- levantó una ceja y me beso de nuevo.
Me giré rápidamente para posicionarme encima de su exquisito cuerpo. Besé cada centímetro de su cara y baje poco a poco.
Ahora iba a conocer al demonio que llevaba dentro.
Besé y lamí su cuello consiguiendo sacarle algún que otro gemido. Paré en seco cuando llegué a su herida. Me miró divertida.
-¿Qué pasa? -preguntó inocente.
-Me cuesta mucho contenerme. -le confesé.
-No lo hagas.
Abrí los ojos como platos. No sabía lo que decía. Normalmente si estaba bien alimentado podía parar pero tan solo si estaba excitado perdía el control.
-No sabes lo que dices. Puedo matarte ya lo has visto.
-Sé que no lo harás. -me dijo mientras acariciaba mi cara.
-¿Como puedes estar tan segura? -le exigí.
-Confío en ti Damon. Ya estaría muerta si eso quisieras.
Tenía razón pero no podía permitirme la posibilidad de acabar con su vida.
-Nunca nadie a confiado en mi. -susurré. Me acercó a sus labios y me besó tiernamente.
-Tengo el placer de ser la primera. ¿Cuanto hace que no comes? -me llevo la cara a su cuello y cerró los ojos. Su olor era delicioso.
-Por favor. -susurró.
Me lamí los labios, era un tentación pero no quería matarla como en mi sueño. Me apretó más contra su cuello. Los colmillos estaban más afilados que nunca. Abrí un poco la boca. Primero besé la herida y lentamente clavé mis colmillos. Cuando rasgué nuevamente su piel apretó los labios. Succioné muy despacio para no hacerle tanto daño. Su sangre era caliente y tenía un sabor delicioso. Era todo un manjar. Se deslizaba lentamente por mi esófago producientome pequeños escalofríos. Ella temblaba debajo de mí. Pare de repente.
-No pares. -jadeó.
Su voz me excitó más y succioné esta vez con más fuerza. Sus manos se aferraron fuertemente a mi cabeza apretándome más a ella. Su respiración se volvió entrecortada. Entonces entendí todo, ella había bebido de mi sangre y ahora nos unía un vínculo muy fuerte. Ella podía sentir mis sensaciones y yo las suyas. Estaba tan excitada como yo.
Dejé de succionar y la miré. Tenía los ojos cerrados y se humedecía los labios. Abrió los ojos respirando profundamente. Me besó con desesperación, como si se acabara el mundo. Manché toda su boca de sangre que limpié lentamente con mi lengua. Volvimos a fundir nuestros cuerpos en uno, hasta llegar al más preciado éxtasis.
-Ha sido increíble. -canturreó con la voz aún entrecortada.
-Guau. -logré decir.
Unos golpes en la puerta me sacaron de la ensoñación. Nos miramos sorprendidos.
-Damon tengo que hablar contigo. -Elena.

3 comentarios:

  1. Luna, quiero mas, ¿como se te ocurre dejarme a medias? ¿que le quiere decir ahora ELena?
    Me encanta tu estilo Luna, estoy deseando leer el siguiente.
    Besos.


    Bonnie

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  2. omg!!!1 dios... mas le vale a elena que no intervenga, que se vaya feliz de la vida con su amor y me deja damon ser feliz jajaj... bueno luna espero que no demores mucho, porque mir como llegas y lo cortas jajaj... bueno besotes y nos leemos pronto =)

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  3. Que aguafiestas es Elena, arrrrrrrr, y ahora que?
    Voy a por el trece.

    Besos

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